22.11.06

Metapost

      Siempre me ha parecido soez, inelegante y poco sutil opinar por Internet.
        Me pregunto, ¿qué clase de interés pueden tener para los demás las cuestiones que uno mismo se plantea sobre las cosas? Por eso los blogs me repelen: apenas puedo soportar el dislate que significa presuponer que a cualquiera pueda interesar las prescindibles reflexiones plagadas de infinitivos de quien presume firmar cada artículo. Es necesaria tal cantidad de supurante egocentrismo, recalcitrante prepotencia y desmedida ignorancia, que se me hace difícil creer tales faltas a la coherencia y al rigor. Pero lo que me lleva al paroxismo de la rabia es cuando tales autores arremeten contra algo manifestando un sentimiento hiperbólico que en realidad no padecen, llegando incluso (en lo que ya resulta el extremo del embuste, la corrupción del alma y la insensatez más cobarde e indigna) a sentenciar a grandes grupos con juicios éticos carentes de base.
          En una ocasión conocí a un bloggero que se valía de anécdotas de otros para explicar sus estúpidas y obvias teorías. Sus conclusiones eran de lo más vacío, dado que aquellas anécdotas se agotaban en la mera explicación. Era realmente irritante, casi tanto como la delirante tendencia que tiene todo el mundo a generalizar, a quejarse por todo y por todos, y a alzarse con la autoridad total sobre cualquier tema, sentando cátedra de una forma reiterativa y sin ningún tipo de pudor. Pero esta tendencia palidece en comparación con la de alargar las reflexiones hasta el absurdo, llegando incluso al recurso de una baratísima tendencia al metalenguaje y a la autofagia más falaz y empleando todo tipo de adjetivos sinónimos, similares y equivalentes para ampliar el espacio todo lo posible en un intento de hacer creer a todo el mundo que se tiene la razón fuera de toda duda.
            En suma, si he de ser yo quien ice la bandera y blanda una lanza para cambiar el mundo de los blogs, asumiré esta responsabilidad con todo el rigor que se me supone. Créanme si les digo que no les defraudaré.

            17 comentarios:

            Anónimo dijo...

            Puto loco. Molas.

            Anónimo dijo...

            Vaya obra maestra, quillo...

            Juanjo Iglesias dijo...

            Le felicito, amigo. Lo ha pillado a la primera. Y cuento con que no es fácil...

            Anónimo dijo...

            Lo que yo entiendo, es que el escribiente cae constantemente en lo que critica, de ahí que me parezca arrebatador...

            NO sé sí.......

            Juanjo Iglesias dijo...

            ¡Calle, calle! Acaba de descubrir a mis lectores la solución. Ya no podré reírme de ellos cuando lean el artículo y lo interpreten como algo lógico...

            Kelzor dijo...

            Esto lo ha escrito REFO.

            Juanjo Iglesias dijo...

            ¿Es lo más inteligente que se le ocurre?

            Venga, usted puede.

            Kelzor dijo...

            Nah, olvidelo. Detesto los comentarios que no aportan nada al motivo del post y que sólo sirven para mostrar gustos personales.

            Juanjo Iglesias dijo...

            Bien, bien... le falta un poco de afinación. Pero bien.

            Morgaana dijo...

            Pues estás dando tu opnión. No se si te has dado cuenta

            Juanjo Iglesias dijo...

            Le felicito, Morgaana. También usted ha descubierto la intención.

            Ahora lea los comments de quienes lo descubrieron antes que usted.

            Morgaana dijo...

            Es que no leo los comentarios anteriores. No quiero que me influyan

            Queco dijo...

            Wow. 100% humor metalingüista.

            Anónimo dijo...

            Meta tomar por culo!

            Juanjo Iglesias dijo...

            Oh Dios mío...

            Creo que acabo de sufrir un infarto.

            Anónimo dijo...

            para paja mental dona.

            Por cierto, se deja a usted mismo a la altura del betún...

            No ha sabido parar su propio ciclo.
            Si no hubiese contestado a ningún comment y su mensaje hubiera acabado en el mismo post, el círculo se habría cerrado. El PROBLEMA ha sido vanagloriarse de ese post con lo que el círculo se ha estrechado sobre usted y ha caido en su propia trampa. Se ha convertido en aquello que criticaba con su paradoja.

            Que paradoja, verdad?

            Anónimo dijo...

            JAJAJAJAJAJAJAJA